Pedro Salinas, un agnóstico, anhela que el Sodalicio, la congregación religiosa que lo manipuló en su juventud, sea suprimida y sus miembros enfrenten la justicia civil por los abusos físicos, psicológicos y sexuales que alegan haber sufrido en nombre de una supuesta vocación divina.
Salinas ha escrito libros para exponer las mentiras de esta organización y abogar por las víctimas. Recientemente, entregó un libro de casi 900 páginas al arzobispo de Malta y al sacerdote español Jordi Bertomeu, enviados por el Papa Francisco para investigar los abusos del Sodalicio.
Estas reuniones se llevaron a cabo en la Nunciatura Apostólica de Perú y son parte de un esfuerzo por buscar justicia y suprimir la aprobación canónica de la congregación.
Fuente: EL PAÍS